COMPRESORES
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El funcionamiento de un compresor de aire se basa en el principio de compresión de gases. En un compresor de aire, el aire se aspira por la válvula de admisión, y se comprime en el cilindro a través de un pistón movido por un motor eléctrico o de combustión interna. Una vez que el aire ha sido comprimido, se almacena en el tanque a alta presión, para ser utilizado posteriormente.
Las principales partes de un compresor de aire son: Motor (impulsa el compresor), Cilindro (comprime y almacena el aire), Tanque (almacena el aire comprimido), Válvula de admisión (permite la entrada de aire), Válvula de escape (permite la salida de aire), Filtro de aire (limpia el aire) y Manómetro (mide la presión del tanque).
Un compresor de aire es una máquina que se utiliza para comprimir y almacenar aire en un tanque, con el fin de generar energía neumática. El aire comprimido es utilizado en una amplia variedad de aplicaciones, como la operación de herramientas neumáticas, la limpieza de superficies, la pintura, entre otros.